Friday, August 29, 2025

Mi participacion en la exhibición de Veles,Macedonia 2025


Quería agradecer nuevamente a la organización de la exhibición y concurso de la ciudad de Veles en Macedonia por invitarme y ser parte de esta nueva convocatoria e incluir algunos de mis trabajos,páginas de cómics reproducidas en la muestra del corriente 2025.No es la primera vez que participo y para mí es un honor ser considerado siempre para este tipo de eventos donde nos dan un espacio a artistas de otros países,uno valora cuando es también valorado y tenido en cuenta,sea del punto del mundo que sea. Es grato formar parte y se considerado para exponer en esta exhibición y mostrar nuestros trabajos en distintas partes del mundo,en este caso otro país balcanico que nos abre sus puertas.Así que nuevamente mi agradecimiento para toda organización y por el certificado y las fotos que acompañan este posteo.

















 

Monday, August 25, 2025

Concientización sobre el uso de la historieta como herramienta pedagógica y terapéutica

 


No estaba errado en mi percepción del valor que tiene el arte,principalmente la historieta,como herramienta pedagógica y terapéutica.  Tampoco mi lectura sobre un malestar social que se traduce en un progresivo avance de la depresión que atraviesa a la sociedad argentina. Según un informe de la Univ. Católica (ODSA-UCA) 1 de cada 4 argentinos lo esta padeciendo o tuvo síntomas de este flagelo y crisis de la salud mental.

https://asociacioneducar.com/blog/efectividad-de-una-intervencion-de-salud-mental-basada-en-comics/




Wednesday, August 20, 2025

47, el muerto (25 años después)

 

«47, el muerto» (2000), cortometraje argentino dirigido por Adrián Dentoni y Fernando Gabriel Sosa, es considerado uno de los primeros ejemplos de terror de revisionismo histórico en América Latina. Ambientado durante la dictadura militar argentina, invierte los roles tradicionales de víctima y agresor, mostrando a un ex-repressor atormentado por el espíritu de una de sus víctimas. La obra influyó en producciones posteriores, incluyendo la película 1978, consolidando la tendencia de usar el horror para explorar traumas históricos y sociales.

El cortometraje permaneció durante décadas en un nicho limitado, y su reconocimiento histórico fue en gran medida invisible hasta que se documentó y difundió de manera sistemática en plataformas como YouTube y bases de datos de cine. La visibilización de la obra no solo reconoce la innovación temática y estética de sus creadores, sino también el esfuerzo colectivo de artistas y colaboradores a lo largo de 25 años, asegurando que la memoria de esta producción pionera se preserve frente a la apropiación de ideas y la centralización cultural.

El registro del cortometraje, sus referencias en IMDb y su inclusión como antecedente de 1978 refuerzan su valor histórico y su contribución al desarrollo del terror político en el cine argentino.


“Lo que pasó con la UNC y hoy se repite en la UPC revela una misma política de exclusión: filtrar, marginar y castigar a quienes no encajan en su molde. Lo viví en dos etapas distintas de mi vida, en dos carreras diferentes, y siempre bajo los mismos criterios punitivos y desalentadores. Sin embargo, ellos se equivocaron conmigo. Nunca deberían subestimar ni negarle contención y oportunidad a alguien que se perfila con ilusión y compromiso, porque a la larga, algunos hacemos la diferencia.”

 

~Fernando 

Thursday, August 14, 2025

El Gran Debate

 





Ese es un verdadero docente,un mentor con vocación que te insta a pensar a revelarte y no ser meramente un esclavo cobarde que solamente acata las órdenes sin chistar.La verdadera rebeldía empieza muchas veces en la formación cuando nos enseñan a que debemos ser libres y no estar sometidos por miedo.

Sacando a la luz lo que quisieron ocultar:una presencia global.

 


“En los últimos estertores de mis 50 años y sigo en pie. Cada caída me hizo más fuerte, cada golpe templó mi carácter como el acero. He aprendido que el cansancio es parte del camino, pero la voluntad no se agota. Hoy me levanto, me reinvento y sigo creando, construyendo mi legado a mi manera.

No me invisibilizaron. No necesité a la UNC, UPC, legisladores ni a la política obsecuente para validar mi trayectoria. Ni la prensa alcahueta, ni generaciones de pibes bonsái, cobardes o resentidos escondidos tras una pantalla me juzgaron prejuiciosa y psicológicamente. Me golpearon cobardemente en las sombras, no cara a cara; me abandonaron colegas y compañeros, se burlaron y atacaron como hienas… pero me levanté, me sacudí el polvo, resurgí, triunfé y lo logré por mí mismo. Soy digno porque soy quien soy: un hombre que se hizo solo, sin caretas, sin pretender agradar a nadie más que a mí mismo, sin mentirme, siendo yo. 💥💪 🔥💪”

 

®Fer Sosa

Sunday, August 03, 2025

"Somos luz cuando vibramos juntos"


 

No me quería ir con ese sabor amargo en la boca y en el alma después de tanto análisis sesudo y poco esperanzador de lo hablado mas temprano.Quiero siempre ver algo mas positivo,y aunque a los ojos de los demás pueda parecer sentimientos bipolares¿que es el hombre sino producto de sus pensamientos y acciones,una contradicción? Puedo permitirme reflexionar desde una critica dura de despertarnos ante una realidad que agobia,pero a la vez mantener una mirada que va mas allá de lo coyuntural,porque hay algo más que este presente lleno de incertidumbre,somos y soy testigo de mi tiempo,como otrora lo fueran otros seres,menos impuros que yo,mas santos y también se manifestaron contra la realidad y tiempo que les toco vivir,muchos perecieron ante el mensaje que los instaba a despertar a su prójimo,fueron perseguidos,silenciados y hasta pagaron con su vida. Yo,lejos de querer ser un mártir,me manifiesto como el humano lleno de contradicciones que soy,pero por serlo me permito,encolerizarme,reflexionar,reír,llorar y a la vez buscar un mensaje,símbolos y recordar que estamos aquí por algún motivo,que venimos a trascender y a conectar mundos,lo tangibles y lo inmaterial como el aire que nos rodea y no vemos,pero sabemos que ahí esta y nos da vida. De todo eso estamos hecho,de virtudes,errores,de carne y lo etéreo.

Somos humanos y divinos,pero en este camino que es la vida,a veces nos perdemos y olvidamos de seguir nuestra brújula interior.

"Somos luz cuando vibramos juntos"
Cuando el miedo cae y el amor canta,
cuando los cuerpos se abrazan sin verse,
cuando la palabra se calla y el alma canta,
entonces sucede lo imposible:
Dios habita entre nosotros.

Saturday, August 02, 2025

Argentina: entre la oportunidad histórica y la traición repetida

 



Una reflexión sobre las oportunidades de cambio perdidas, y el rol que aún podemos jugar quienes no claudicamos

Hay momentos bisagra en la historia de un país. Instantes donde el pueblo, aún en medio del hartazgo y el dolor, se levanta con una claridad sorprendente. Uno de esos momentos fue diciembre del 2001.
En ese entonces, la casta política fue rebasada. No importaban los sellos, los colores ni las caretas. El “que se vayan todos” no era una consigna vacía: era una epifanía colectiva.

En ese fuego de asambleas, de ollas populares, de toma de conciencia, se vislumbraba algo nuevo. Algo auténtico. Algo que pudo haber cambiado de raíz el rumbo de este país.
Pero entonces, el sistema hizo lo que mejor sabe hacer: absorber, corromper, desactivar.

Esa maquinaria camaleónica, reapareció como contención. Como una suerte de “madre tutelar del caos”. Y muchos, por miedo o conveniencia, se replegaron a lo conocido.
La oportunidad se perdió.

Como ya se había perdido en los 70s, con el Cordobazo y toda esa generación que soñó con una patria socialista, solidaria, libre. La infiltración, la represión y el oportunismo también arrasaron con ese impulso.

Y es esa historia la que se repite, una y otra vez, con distintos nombres y ropajes. Lo nuevo es abortado en nombre de “la gobernabilidad”. La rebeldía genuina es difamada.
Y quienes se animan a señalar la podredumbre, a proponer, a construir desde otro lugar, son tildados de locos, parias del sistema o conspiranoicos.

Constancia histórica:

Lo viví en carne propia. Desde mi paso por la UPC, donde fui acusado de tener intenciones ocultas simplemente por proponer ideas organizativas y solidarias, hasta mis intentos de darle a la cultura gráfica un lugar transformador. Me enfrenté con burócratas, oportunistas y traidores disfrazados de colegas. Pero más allá del sabor amargo, eso también me permitió ver.

El mayor pecado fue contar una verdad,el origen de esa universidad pública,una que fue a base de lucha estudiantil y docente,pero que ante la historia viva de un alumno que fue parte de toda esa movida.

Llamar a los jovenes a revelarse, cuestionar,desobedecer sin perder esa esencia revolucionaria a veces nos hace chocar contra una pared,llena de egoismos,de poca empatia,solidaridad con sus compañeros y una tibieza y cobardía que apabulla.

La realidad me mostro que hay verdades que incomodan y es más fácil difamar de agitar o acusar sin fundamentos de intereses políticos para disuadir todo intento de cambio o recordarles del rol que tuvo la lucha estudiantil y obrera en nuestra historia,como lo fue la reforma universitaria del 1918,el Cordobazo o mi generación que lucho y resistió el cierre de las escuelas de artes y oficios ante la topadora neoliberal del menemismo y el radicalismo cordobés en los 90's.

No soy un iluminado ni mucho menos,soy un argentino más, que piensa, que ama a su tierra y que se niega a rendirse. Porque detrás de cada traición, de cada aplastamiento de las ideas nuevas, hay una estructura enferma que sigue reproduciendo el mal.

Y es esa estructura la que sigue anestesiando a la sociedad.
Hoy no hay reacción, ni desde el sindicalismo, ni desde el arte, ni desde el periodismo. Los colectivos sociales están cooptados, y la juventud parece huir hacia el cinismo o el nihilismo.

Nos convirtieron en espectadores.
Pero algunos seguimos resistiendo.
Desde el gris, desde el margen, desde la trinchera silenciosa de la crítica sin banderías.
Y aunque el horizonte parezca sombrío, aún creemos que puede surgir otra cosa. Algo nuevo, sin contaminaciones.
Un verdadero movimiento cultural, político y espiritual.

📚 Mi voz en “Hijos del 2001”

Este libro, compilado por mi compañera María Salomé Suárez, no es solo un registro de lo vivido, es una declaración de guerra contra el olvido. En Hijos del 2001: Voces de una generación en crisis vuelco una parte de mi historia, de nuestras luchas,la de nuestra generación y de las veces que intentamos cambiar las cosas y nos estrellamos contra una estructura podrida, sostenida por los mismos de siempre.

No escribí desde la nostalgia ni la victimización. Escribí desde la bronca, desde la frustración de haber sido parte de una oportunidad histórica que fue saboteada y también desde la convicción intacta de que no todo está perdido, de que todavía se puede incendiar la pradera si nos dejamos de tibiezas.

Gracias a Salomé por dar voz a quienes seguimos resistiendo, sin roscas politicas, pero con memoria y dignidad.

 


Argentina, la encrucijada del sometimiento o la resistencia

 


 

"Envenenan nuestras mentes y almas con programación,
y nuestros cuerpos y alimentos con químicos,
nuestras tierras y ríos con glifosato y demás porquerías."



☠️ Triple guerra invisible:

  1. Mental

    • Entretenimiento tóxico

    • Desinformación constante

    • Adoctrinamiento encubierto

    • Normalización de la decadencia

  2. Biológica

    • Agrovenenos como el glifosato

    • Transgénicos y alimentos chatarra

    • Adicción farmacológica programada

    • Enfermedades inducidas o exacerbadas

  3. Espiritual

    • Vaciamiento simbólico

    • Pérdida de raíces

    • Burla de toda trascendencia

    • Suplantación del alma por algoritmos


🧠🔥 Contra el veneno: la mente, la tierra y el alma en pie de guerra


1. La guerra mental

La primera línea del frente está en la mente.
La batalla es silenciosa, cotidiana, y se libra en pantallas, titulares y algoritmos.
Nos reprograman a través de medios, redes sociales, “entretenimiento” anestesiante y sistemas educativos que no educan para pensar, sino para repetir y obedecer.

Desde chicos nos enseñan a dudar de nuestra intuición, a confiar más en lo que dice un “experto” que en lo que sentimos en las tripas.
Los noticieros no informan: dictan relatos.
Las series no distraen: modelan conductas y valores artificiales.
El lenguaje ha sido intervenido, desnaturalizado. Se nos impone cómo hablar y hasta cómo sentir.
Se nos vacía de ideología, de historia, de símbolos, y se nos llena de “contenido”. Todo fragmentado. Nada conecta.
Y así, sin darnos cuenta, dejamos de cuestionar. Nos acostumbramos.


2. El cuerpo como campo de batalla

Comemos veneno y lo llamamos alimento.
La tierra que pisamos ha sido rociada con glifosato y tratados con venenos que, lentamente, nos matan desde adentro.
Nos venden carne, pan y leche llenos de antibióticos, hormonas y aditivos.
Nos curamos de una cosa y enfermamos de tres.
Y cuando nuestro cuerpo reacciona, nos tildan de “delirantes”, “alternativos” o “conspiranoicos”.

Pero no hay teoría. Hay prueba empírica diaria:

  • el agua contaminada,

  • las frutas sin sabor,

  • los pueblos fumigados con cáncer,

  • los niños con déficit atencional que necesitan una “pastilla”.

Han envenenado la tierra, nuestros ríos, nuestros cuerpos.
Pero también nos han quitado la conexión con ellos.
No sabemos plantar, no sabemos curarnos con hierbas, no sabemos ni siquiera caminar descalzos.
Nos hemos alienado del cuerpo, del paisaje, del sol.


3. El alma sitiada

En medio de esta manipulación masiva, el alma queda sitiada.
Se nos ridiculiza por creer en algo más allá de lo tangible.
Todo lo que no puede medirse, escanearse o monetizarse es tildado de superstición o locura.


¿Buscás una conexión con lo sagrado? serás tildado de fanático.

Pero hay una verdad innegable: somos seres espirituales, nos guste o no.
Nuestra conciencia está hecha de algo que no se explica en laboratorios.
Y quienes han soñado con cuevas, con gigantes, con portales, con demonios o dioses antiguos, lo saben.
Algo nos habla. Algo está latiendo más allá del espectáculo del mundo.

Nos han vaciado el alma para llenarnos de nihilismo, cinismo y desesperanza.
Pero en el fondo, una chispa queda viva.

Henry Kissinger, pieza clave del tablero geopolítico global durante décadas, defendió sin rodeos el liderazgo de Estados Unidos como garante del "orden internacional". En sus declaraciones dejó claro que países como Argentina debían alinearse con esa agenda o enfrentarse a consecuencias internas graves. No era una advertencia; era una sentencia: "Si Argentina no se somete al nuevo orden mundial, será balcanizada, palestinizada, libanizada". Este tipo de expresiones, lejos de ser teorías conspirativas, son pistas claras sobre cómo se piensa la política exterior en las altas esferas del poder global.

Hoy, esa profecía retumba como una amenaza latente. En la Argentina contemporánea se ve una peligrosa combinación: un liderazgo político alineado abiertamente al eje del capital financiero internacional (con discursos mesiánicos, motosierra en mano y sin anestesia), una elite cómplice del vaciamiento nacional, un pueblo adormecido por la propaganda y un territorio codiciado —Patagonia, litio, agua dulce— por actores externos.

Los síntomas del sometimiento están en todas partes:

  • Endeudamiento impagable con el FMI, que ata decisiones soberanas.

  • Políticas antiobreras que destruyen el tejido social.

  • Entreguismo territorial disfrazado de “inversiones extranjeras”.

  • Medios hegemónicos que idiotizan con entretenimiento tóxico y falsas agendas.

  • Suelo y cuerpos contaminados con agroquímicos y productos farmacéuticos sin control.

  • Educación arrasada, cultura subestimada, ciencia despreciada.

Pero también hay resistencia. Hay una conciencia que despierta, una voz interior que no se resigna, una inteligencia y alma colectiva que se rehúsa a ser colonizada mental, espiritual y materialmente. No hace falta tirar una bomba para destruir un pueblo; basta con corromper su alma, su memoria histórica, su sistema educativo, su soberanía alimentaria, su cultura. Esa es la guerra silenciosa que vivimos.

Y en ese contexto, no podemos ignorar los proyectos a largo plazo como el Plan Andinia, mencionado por figuras históricas como Theodor Herzl, y repetido por actores locales —como el exministro Sergio Bergman— al hablar de la Patagonia como "tierra prometida". No es casualidad que los territorios más ricos y estratégicos del país estén siendo vendidos o concesionados a intereses foráneos mientras se impulsa una demolición sistemática de las estructuras que permiten el bienestar común.

Por eso, no se trata sólo de economía o política. Se trata de la existencia misma de una nación libre, pensante y soberana. El futuro está en juego. Y como dijera una vez alguien muy sabio:
“Cuando la injusticia se vuelve ley, la resistencia se vuelve deber.”

 

 

🧠🔥💣 Argentina sitiada: entre el veneno y la traición – Crónica de una guerra invisible


I. El alma en pie de guerra: lo que nos hacen sin disparar un tiro

Nos envenenan la mente, el cuerpo y el alma.
Nos roban el futuro, y hasta el recuerdo de lo que fuimos.
Pero la guerra no siempre se libra con bombas.
A veces se libra con políticas económicas, tratados secretos, discursos anestesiantes, y sonrisas de traidores en la tele.

Hoy más que nunca, la Argentina se encuentra al borde de un abismo civilizatorio.


II. Kissinger, el nuevo orden mundial y la profecía de la sumisión

No es teoría de la conspiración.
Es teoría de planificación global.

El ex secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger, arquitecto del mundo unipolar y del chantaje a las naciones del sur, lo dijo claro:

"Argentina debe alinearse al Nuevo Orden Mundial, o será desestabilizada desde adentro como ocurrió con Líbano."

Lo llamó “libanización”, una palabra que parece lejana pero es perfectamente aplicable al desguace argentino:

  • fragmentación social,

  • tribalismo político,

  • caos económico,

  • guerras internas fabricadas.

La advertencia no fue inocente. Fue una hoja de ruta.


III. La deuda eterna: el yugo moderno del coloniaje

El arma más letal ya no es el cañón, es el Fondo Monetario Internacional.
Nos endeudan gobiernos que no rinden cuentas a su pueblo, sino a los bancos.
Los que firman esos pactos no lo hacen para salvar al país, sino para hundirlo en la dependencia.

Cada préstamo no es un rescate:
Es un collar. Una cadena.
Y Milei, como otros antes que él, no corta la cadena: la pule y la besa.

La motosierra no va contra la casta, va contra los trabajadores, los jubilados, los científicos, los docentes, la cultura.


IV. Plan Andinia, la “tierra prometida” y las palabras no tan veladas de Bergman

Si Kissinger es la voz de Washington, Bergman ha sido la voz local del sionismo globalista disfrazado de ecologismo espiritual.
Cuando fue ministro de Medio Ambiente dijo sin pudor:

"Argentina es una tierra prometida."

¿A quién se la prometieron?

El Plan Andinia, tan ridiculizado por los medios como “conspiranoia”, encuentra correlatos inquietantes en:

  • los mapas geoestratégicos del agua dulce,

  • la compra de tierras por millonarios extranjeros,

  • el vaciamiento sistemático de la soberanía nacional,

  • y la militarización selectiva del sur.

Theodor Herzl lo escribió como deseo.
Bergman lo repitió como consigna.
Y algunos sectores lo ejecutan como proyecto.


V. La política como teatro de traidores

La casta no es solo política: es económica, mediática, eclesiástica y farmacéutica.
Gobierne quien gobierne, la entrega sigue.
Con sellos distintos, se sirve al mismo amo.

Desde Menem hasta Milei, pasando por Macri y los administradores del progresismo obediente, la entrega avanza a cara descubierta:

  • tierras a extranjeros,

  • laboratorios internacionales sobre nuestra salud,

  • educación degradada,

  • fuerzas de seguridad al servicio de Washington,

  • destrucción del aparato productivo.

¿Querías soberanía? Te dieron Netflix.
¿Querías futuro? Te dieron créditos en cuotas.
¿Querías libertad? Te dieron pastillas y aplicaciones.


VI. El veneno en todo: comida, noticias y espíritu

Los pesticidas en el campo matan.
Pero también lo hacen los pesticidas culturales.
La mente ha sido adormecida. El cuerpo, degradado. El alma, secuestrada.
Todo tiene su químico. Todo tiene su anestesia.

Ya no hace falta reprimir como en los 70.
Ahora se deprime a través de apps, fármacos y horarios eternos de laburo esclavo.
El pueblo ya no grita: bosteza.


VII. Pero no todo está perdido: la chispa sigue viva

Hay una chispa que no pueden extinguir.
Y está en vos.
Está en mí.
Está en todos los que sentimos que esto no es normal, ni justo, ni inevitable.

La resistencia empieza en la conciencia.
En volver a sembrar.
En decir la verdad aunque duela.
En apagar la tele y prender el fuego.
En dejar de obedecer y volver a creer.


VIII. Conclusión: el alma argentina no se rinde

Argentina es más que su clase dirigente.
Es más que su deuda.
Es más que su sometimiento.

Es un pueblo milenario disfrazado de país joven.
Es un crisol en ebullición.
Es un punto geoespiritual clave, y por eso lo codician.
Pero lo que no entienden es que a este suelo no se lo conquista: se lo respeta o se lo escupe y devuelve.

Hoy, más que nunca, hay que elegir:

  • alinearse o rebelarse,

  • obedecer o resistir,

  • vivir anestesiados o despertar.

La historia no terminó.
La última palabra aún no fue dicha.
Y si estás leyendo esto, tal vez seas parte de los que la digan.