Entrevista a Ariel Olivetti en Perú

Transcrito y editado por Gabriel Zárate

El domingo 6 de diciembre Ariel Olivetti dio la exitosa conferencia: “Detrás de las viñetas del universo Marvel” en el auditorio “Julio Ramón Ribeyro” de 30ª Feria del Libro Ricardo Palma, teniendo como moderador a Giancarlo Román (de Ciudadano POP) y con una multitudinaria presencia de sus admiradores peruanos que no dejaron de acosarlo con las más variadas y diversas preguntas al gran dibujante de la Marvel.

Presentación: Quiero agradéceles a todos por estar acá, personalmente, la verdad que es, mucho más de lo que yo esperaba. Quiero agradecer a Perú, me han recibido excelentemente bien. Me voy súper contento y con ganas de volver. Bueno, en la charla vamos a ver algunos chismes y algunas cositas que están por detrás de los comics y por supuesto la parte más linda e interesante va a ser cuando ustedes tengan algunas preguntas para hacer y yo se las pueda responder.

Los inicios en el comic: Yo empecé siendo más que nada dibujante e ilustrador. Empecé a los 19 años llevando a una revista, que en ese momento era la mejor revista en Argentina: La revista Fierro. Y lleve tímidamente dibujos desprolijos en blanco y negro a la revista Fierro y por supuesto me rebotaron. Me dijeron: “No falta mucho, tienes que hacer esto, lo otro. La carpeta está muy desprolija, pero, podrías llegar a andar”. Así que a la semana siguiente volví con una carpeta mas prolija y me dijeron: “Si, la carpeta esta prolija, pero a esto le falta mucho, falta profesionalidad”. Bueno, así durante cuatro veces fui rebotando, rebotando hasta que un día aceptaron tenerme en la revista, en la parte interna de la revista, en dibujitos de blanco y negro, que para mí fue ya entrar, al mundo de la imagen y el comic.

El primer trabajo: El primer trabajo pagado fue un dibujito en blanco y negro en la revista Fierro, mi primer trabajo pago en revistas de comics, pero en el dibujo antes de hacer eso, pinte remeras de los ositos cariñosos, de las frutillitas, todo. Todo lo que tenga que ver con la grafica se podía hacer, y si me podían llegar a pagar por eso, era bienvenido.

La primera historieta: Fue para la revista Fierro también, con un guionista que ahora es un escritor famoso que se llama Pablo De Santis y fue una cosa muy rara porque él me entregó el guion de la historieta que eran dos páginas y yo la verdad es que no lo entendí: ¿Cómo va la historieta? ¿Cómo es? (Pablo De Santis): “Ya bueno, la verdad es que yo tampoco se mucho, pero es una cuestión muy libre. Vos tienes que hacer lo que interpretes”. La revista Fierro se caracterizaba por ser una revista de comic alternativo, por ser un nicho muy bueno para poder experimentar y tratar de hacer cosas nuevas. Algunas cosas eran buenas y otras cosas eran malas. Este fue el caso de una de las malas, no se entendía lo que quería decir la historia.

Otros oficios: Yo soy diseñador gráfico publicitario. Me recibí de diseñador grafico publicitario y hacia cosas de diseño y cobraba un dinero haciendo cosas de diseño y publicidad. Pero antes de eso trabaje en una marroquinería armando carteras para damas, para poder pagarme la universidad. Estuvo bien porque me pude pagar los estudios, sirvió.

Hacer comics de por vida: Tome conciencia desde que era chiquito. Pero cuando me di cuenta que si podía trabajar de esto, es cuando vi mi primera portada impresa en el kiosco: Dije: “Al lado de tal revista y otra que es reconocida esta la mía, con mi portada”. Fue importante, y creo que fue al mismo tiempo que mis padres empezaron también a reconocer como que no me iba a morir de hambre de eso. Por supuesto sabrán que uno busca, consciente o inconscientemente, siempre la aceptación de los padres. El ver que mis padres me aceptaban como dibujante para mí fue creérmelo y creer que podría llegar a vivir de eso. Por supuesto que no podía vivir de eso, porque con una portada cada mes o cada dos meses, me moría de hambre, pero el creérmelo fue el primer paso. Luego pedir trabajo de dibujante sabiendo que yo era dibujante no es lo mismo que pedir trabajo de dibujante siendo marroquinero, es distinto.

El salto internacional: El año 92, mande unas muestras para EEUU de la mano de otro dibujante que estaba consagrado ya en EEUU: Durañona, y él muestra tres páginas de comics en Marvel, demuestra lo que había hecho yo, pintadas a mano, y tuve mucha suerte de encontrar justo al editor que estaba buscando ese estilo, y me dio un libro para hacer. Estuve dos años trabajando en ese libro y ya desde el 92 hasta ahora estoy trabajando para el mercado yanqui.

Trabajar para la Marvel y la DC: Primero, cuando yo ingrese era medio fan y medio dibujante, entonces era una experiencia que tenía mucha carga de pasión: Dibujar al Hombre Araña o a Superman o a Batman, como que en los primeros cuadritos te tiembla la mano, un sacrilegio. Estoy dibujando al personaje. Después se transforma en un oficio. Y es lo mismo dibujar un coche que dibujar a Spiderman, es lo mismo. Y desde el punto de vista profesional, nosotros todos somos latinoamericanos, sabemos lo que es trabajar para cualquier compañía latinoamericana: Es un problema cobrar, el trato con los jefes. Entrar a una compañía de este tipo multinacional, es distinto: Por cómo se manejan los pagos, hasta las fechas de entrega, la rigurosidad que hay, es realmente un cambio, un cambio para bien. Uno está acostumbrado a la cosa no tan rigurosa, te entrego mañana y mañana es pasado mañana: “y total, es lo mismo mañana que pasado mañana, no nos vamos a pelear por un día” Allí si mañana es mañana, o te quedaste sin trabajo, así, y bueno, la rigurosidad que tienen ellos para exigir, también la tienen en el momento de dar. En Argentina a mi me decían: “Bueno esto sale tanto dinero, te vamos a pagar doscientos pesos” y cuando uno va a buscar los doscientos pesos, te dan un cheque a cobrar en tres meses. Y en Argentina, como ustedes saben, en tres meses ya no son doscientos pesos, son ciento ochenta y a los seis meses son cien. Entonces el tiempo es oro en serio, en latinoamericana.

El estilo: Yo ingrese al mercado muy influenciado por algunos dibujantes que estaban funcionando muy bien: Bisley, Corben y poco a poco creo, que me fui despegando, pero no adrede, no fue buscado pero me fue saliendo solo. Es como se logra el estilo. El estilo son los recursos que tiene uno para hacer las cosas que no le salen bien. El estilo lo van formando los recursos que busca cada uno. Son los atajos que toma cada uno como para solucionar los problemas que tiene, de forma personal para dibujar. Si a uno no le sale bien las manos entonces tratara de hacer algo como para simplificar las manos de una forma y eso forma parte del estilo de cada uno. Entonces cuando yo veo por allí que los chicos copian a otro artista, están copiando los atajos que tomo ese artista, para solucionar sus propios problemas. Están entrando por la puerta de atrás a un estilo. El estilo se va formando sin proponérselo uno, sino solucionando los problemas personales en el dibujo, allí se va formando.

Robando estilos: Robando es una palabra que te incrimina, como que estas cometiendo un pecado terrible y es en realidad la única forma que tiene el grafico de aprender a dibujar: Es absorbiendo como una esponja todo lo que ve. El grafico aprende viendo y por supuesto practicando. La única forma que tiene de obtener información grafica es mirando y tratando de reproducir lo que ve. Ahora, si yo hago un cuadrito calcado y pongo abajo mi nombre, eso sí es un robo. Pero si yo uso eso como para dibujar en mi casa y ver como lo hizo, y eso si es una linda técnica de aprendizaje.

Referencias: Según para que cosas son indispensables, por ejemplo, yo no tengo idea de cómo se dibuja un tractor. Si no tengo una referencia, voy muerto entonces. Hay muchas cosas para las que necesito referencias. Tampoco sé exactamente de anatomía todo. No sé bien cómo es la vena que esta por detrás de la pantorrilla y si tengo que hacer un primer plano de eso, bueno, necesito una referencia. Las referencias son fundamentales.

Como dibujar para la Marvel y DC: Para que empezar, primero ir a una academia, a una escuela o un taller. Si ya tienen un nivel como para dibujar bastante bien y si pueden ser discípulos o ayudantes de un dibujante profesional, está muy bueno eso. Porque aparte de dibujar bien usted va a necesitar, para entra en el circuito profesional, hacer el trabajo en un tiempo determinado. Entonces eso se lo va a dar, el trabajo de ayudante y una vez que ya están bien capacitados, que tienen el tiempo que se necesita para poder trabajar y todo para poder entrar en el medio, y bueno, armar una carpeta profesional. Hay un montón de sitios de internet donde dicen como se arma una carpeta, que es lo que está buscando cada editorial. Incluso creo que la pagina oficial de Marvel y DC dice lo que exigían exactamente para ver una carpeta y creo que lo siguen haciendo. Y después lamentablemente, si, estamos lejos de EEUU para que sea tan fácil para nosotros. Pero la mejor forma de mostrar y la única que conozco yo, es ir a una Convención que hay quince o veinte por año en EEUU y ver directamente a los editores y presentarles la carpeta a los editores.

La pasión del dibujo: El gusto por dibujar no se pierde, lo que pasa es que cuando son tantas las horas se transforma en un oficio. Algo que era un hobby se convierte en un oficio y un oficio bastante sacrificado, porque para poder trabajar de esta forma hay que levantarse a la 7 de la mañana, trabajar con la luz del día. Yo cuando empecé era placer puro y me ponía por allí a las 9 de la noche a dibujar tranquilo, en la bohemia, veía el amanecer dibujando. Total, mi mama me despertaba con el desayuno al otro día. Bueno, eso ya no existe, ahora tengo hijos y hay que darles de comer, tienen esa extraña costumbre de comer los chicos, después se lastiman y quieren que los lleven al médico, después tienen frio y quieren que los abriguen, esas cosas que se les ocurren, y bueno, hay que darle los gustos en vida. Así que bueno, hay que trabajar muy duro y cuando uno trabaja muy duro hay un poquito de pasión que se pierde. Tengo por supuesto un inmenso placer en trabajar dibujando, pero hay momentos del día en que digo: “Porque no estaré en una oficina, haciendo algo mecánico, sin tener que pensar”. El dibujo requiere mucha concentración. A veces no es tanto el físico el que se cansa sino es la cabeza. Uno tiene ganas de estar mirando una película, pero bueno.

Los hijos: No han heredado el gusto por los comics, por ahora. No sé si soy culpable pero dibujar si dibujan, les divierte. Yo me puse como meta no inculcarles nada, que sean libres, como hicieron conmigo. Mi papa es abogado, no tiene nada que ver con el arte y nunca me obligo a que yo sea abogado. Lo mismo quiero que pase con mis hijos. Si quiere ser abogado tampoco le voy a decir: ¡No, tiene que dibujar, carajo! Si quiere ser abogado y tiene esa extraña costumbre: ¡Bueno que voy hacer! Si quiere estudiar, igual van a tener que estudiar.

La escritura: No, la verdad que no tengo interés por escribir y las pocas veces que me aventure para poder escribir un guion era horrible. Al principio lo empecé a escribir con muchas ganas, escribiendo lo que me gustaría dibujar y cuando leí las dos páginas que había hecho dije: ¡No! Hay gente que escribe y hay gente que dibuja. Yo no voy a poder escribir nunca, era aburridísimo. Y no, la verdad es que nunca más escribí nada.

Cuando se recibe un guión: El proceso es parecido en casi todos los dibujante de comics. Yo recibo el guión y el guión de un comic es muy parecido al guion de una película, muy similar. Está dividido en páginas, en cada página hay tomas o viñetas, cuadritos que le dicen, y dentro de cada cuadrito hay una especie de recomendación del guionista: Primero lo que sucede, lo que está pasando en el cuadro y después donde pondría la cámara, la iluminación. Hay algunos guionistas que se van por las ramas y hasta nos sugieren olores o temperaturas: “Entra un lugar que es absolutamente helado”. ¡Si no me pones la nieve! Bueno, todas las indicaciones que pueda hacer el guionista igual son bienvenidas, porque a uno lo ayuda a manejar el clima que tiene que dibujar. Una vez que uno tiene el guión, en mi caso, yo lo hago traducir porque mi ingles no es muy bueno. Tengo el guión y empiezo a hacer lo que se llama un boceto de página. Ese boceto de página, que vendría ser el diseño grafico de la página, es un dibujo muy suelto. Es la primera corrección que el dibujante tiene de la editorial. Hay que mandarlo y el editor se fija si está bien contada la historia, si los personajes están bien ubicados en los cuadritos. Ahí es donde se hacen todas las correcciones. Y después de eso, si esta aceptado sobre ese boceto, se hace el dibujo mas terminadito. En mi caso, yo sobre el dibujo terminado, lo escaneo y lo pinto con la computadora. En la mayoría de los dibujantes como no colorean sus propios trabajos, sino que hacen lápiz y entintan, entonces sobre ese trabajo el lápiz lo hacen corregir otra vez. Si esta aprobado el lápiz recién lo entintan. Y una vez que está terminada la página sin globitos y sin textos, se envía a la editorial y la editorial tiene gente que hace los textos, gente que lo va a colorear y bueno se manda a imprenta.

El personaje menos favorito: A veces no fueron los personajes los menos favoritos, sino las historias. A mi uno de los personajes que más me gusta de todos los superhéroes es Batman. Es el que más me gustaba de chico y en un momento DC me dice: “Te vamos a dar una miniserie de Batman”. Yo ya grandote de 35 años estaba recontento, saltaba en una pata: ¡Me han dado Batman para dibujar! “Batman detective”, no se pone la capa nunca. En toda la serie el tipo anda buscando una huella digital. Pelea en dos momentos nada más, se pone el traje dos veces. Y yo estaba que me salía de la vaina por tratar de dibujar a Batman colgado y rompiendo una ventana y tirando las cosas y tirando las cosas de murciélago y no me paso nunca. Y sufrí, cinco números de un tipo hablando con otro y haciendo investigación de policía. Después el personaje que menos me gusta dibujar es el Hombre Araña. En algún momento lo dije, el personaje es sensacional, el personaje me encanta para verlo como lector, pero no para dibujarlo. ¿Por qué? Porque el Hombre Araña tiene muchas rayitas, entonces cuando hay que dibujarlo, uno tarda el doble de tiempo. El hombre araña hay que dibujarlo todo lleno de rayitas, rayitas. Encima no vive en el desierto, vive en una ciudad y hay que dibujar los edificios, los autitos, la ventanitas. Entonces no es tan gracioso, hay que trabajar el triple para ganar lo mismo. Lo ideal es, el personaje que mas disfrute dibujándolo fue el Surfista de Plata (Silver Surfer). Está el tipo con una tabla, no tiene traje, está desnudo y sin pistola y en medio del espacio con tres estrellitas de fondo y chau termino la historia, ahí está y todas las cosas pasan así. Ahora me propuse para dibujar el Hombre Invisible pero no me lo quisieron dar.